Uso del cannabidiol en personas con autismo

Un tema que se ha visto recientemente plasmado en artículos, y noticias son los beneficios del cannabis y uno de sus principales componentes, el cannabidiol (CBD) en personas con Trastorno de Espectro Autista (TEA). Estos estudios arrojaron que el uso del CBD puede ayudar a personas con autismo con los síntomas de este trastorno como lo son los problemas para conciliar el sueño, hiperactividad y ataques de rabia. Más allá de saber los beneficios del cannabidiol se debe entender lo que la ciencia piensa al respecto del uso de este medicamento.

En la actualidad, se han identificado más de 100 componentes que pueden alterar el comportamiento y la cognición en las personas, de ellos los más populares e investigados han sido el tetrahidrocannabinol (THC) el cual es altamente psicoactivo y el ya mencionado cannabidiol el cual es mínimamente psicoactivo. Estos principios activos se encuentran en el mercado de las localidades donde el uso de los mismos es permitido, en diferentes presentaciones y concentraciones para ser administrados; los cuales incluyen las flores secas, aceites, resinas, alimentos, caramelos y pastillas y más.

Un estudio de enero del 2019, se concentró en niños con autismo, se hicieron pruebas con el uso oral del cannabidiol para ver los efectos en el tratamiento síntomas de TEA. Fueron 53 niños y adolescentes entre los 4 y 22 años, los cuales recibieron cannabidiol por 66 días. Esta prueba arrojó los siguientes resultados: ataques de automutilación y rabia mejoraron un 67% y empeoraron un 8,8%. Los síntomas de hiperactividad mejoraron un 68,4%, y no mejoraron en un 28,9%. Los síntomas de problemas de sueño mejoraron en un 71% y empeoraron en un 4,7%. La ansiedad mejoró en un 47,1% y empeoró en un 23,5%

El resultado de esta investigación sobre el cannabidiol y el TEA es una esperanza tanto para las personas con autismo como para sus familias. Sin embargo, a los científicos todavía les queda un largo camino que recorrer si de investigar hablamos, aunque los resultados de las investigaciones son alentadores, se necesita ahondar los esfuerzos para que los médicos se sientan más seguros al momento de formular este medicamento a los pacientes con autismo.